"Magia, risas y hogueras,
la magia del fuego
exorcizando las penas"
De nuevo la noche más corta, de nuevo las llamas bailando con la luna al son de misteriosas melodías, volvimos un año más a celebrarlo en el parque de la cornisa, parece por lo que cuentan que será el último, puesto que a partir del año que viene convertirán un parque público, centro de reunión y disfrute de los vecinos en otro edificio más propiedad de la "sacrosanta" Iglesia Católica S.A.
La fiesta es muy linda, mucha gente, baile, música, danza, risas...... un placer. Ya conocéis el viejo ritual, escribes en un papel aquello de lo que quieras desprenderte y lo lanzas al fuego, la magia del solsticio hará el resto. La mayor parte de la gente quema cosas que tengan que ver con sus males de amores, emociones sobre las que gravita nuestro estado de ánimo y nuestra alegría en gran medida. Vi los escritos de la gente y había muchas cosas que quemar, todo el mundo quería aprovechar el cheque en blanco.... por mi parte no quemé situaciones, ni nada que ver con la suerte, no, quemé mis miedos, mis inseguridades, aquel enemigo interno que se alía con el exterior para rompernos las pelotas. Me quemé a mí, o al menos a una parte de mí, hace años hice algo parecido y me alegra comprobar que la parte que quemo este año es distinta, lo cuál ha de querer decir que avanzamos, aunque sin mapa nunca sabremos en qué dirección....
Tras la quema, las risas, los abrazos y el jolgorio encontré un huequito para mí, en mi soledad contemplaba malabares con fuego, otra danza, otra magia, miles de ensoñaciones........
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