Es el contacto con el resto lo que nos permite observar nuestras carencias, nuestros errores, lo que nos enseña diferentes posibilidades, diferentes puntos de vista. Es también ese contacto la fuente de la que solemos extraer fuerzas en momentos de debilidad, la inspiración para avanzar cuando la pena asola nuestro interior y no vemos camino ni razón para seguir adelante. Es por tanto, absolutamente necesario establecer una red de relaciones que enriquezca nuestra vida y que nos permita enriquecer la de otros. Así mismo el grupo, la comunidad, nos aporta calor, protección, identidad..... pero como todo en la vida también tiene su lado oscuro, sus peligros, el colectivo puede también ser un elemento de presión que impida el desarrolo personal, la libertad individual, el pensamiento crítico. Es aquello que siempre hemos escuchado como "el pensamiento único".
Todos hemos vivido en ocasiones esa sensación de opresión que conlleva el pensar distino que los demás componentes de un grupo, esa distancia que en ocasiones pueda generar, esa soledad,....
Supongo que lo óptimo, como en cualquier faceta de la vida, es el equilibrio, entre el apoyo y la imposición, entre el cariño y la dependencia, entre la admiración y la subordinación,..... entre la protección y la libertad......
Ayer vimos una película que refleja muy bien (a mi juicio) todas estas posibles contradicciones, La Ola de Dennis Gansel.
Y alejándose del rebaño... y de la ola..... Marea
sabes amigo, con esa ya famosa cita de "soy la suma de las visiones que los demás tienen de mi, y la propia", empiezo a pensar que quien realmente se quiere llegar a conocer, necesita un poco de soledad para ello, para sólo captar su propia visión.
ResponderEliminarque buen cierre del post ;), que forma de enlazar! La película está muy bien. En España no pasaría eso ni en broma, pero no por que no haya sentimientos/actitudes latentes, si no porque nuestro sistema educativo es una mierda. No tendríamos semana de proyectos!