Magia anónima

Hoy te vi
en ese extraño mundo subterráneo
que cruzamos cada mañana
camino del trabajo

Pelo blanco, corto,
perilla del mismo color
señorial, caballera

Una sonrisa perenne
y unos ojos vivos
que parecían enviar señales de alegría

Con un walkman, un altavoz,
y ese mágico instrumento áureo,
que hace bailar las notas
abrazadas a los sentimientos

Me hiciste sonreir,
nos otorgaste, a mí y al resto
de pasajeros el mejor regalo.

Ningún directivo te premiará por ello,
ningún empresario pagará tu sustento,
ningún político halagará tu don,
pero en la dulce levedad del anonimato

miles de viajeros te sonreirán
y marcharán camino de sus trabajos
pensando que la vida es algo más
que hacer rodar la noria

Mago de las ilusiones,
no dudes de tus dones,
tú enriqueces al hombre,
con tu música en sus corazones