Las hojas ondean al viento
en la ciudad donde todos corren
figuras enjutas con ojos somnolientos
enfilan hacia las grutas del tren sin nombre
No hay espacio para las miradas
apenas alguna esquiva en la tardía noche,
cuerpos aún fríos adelantan a sus pisadas,
cuerpos heridos que se miran con reproche
El melancólico otoño ha llegado
a la ciudad donde todos corren
sus grises cielos y su aliento helado
empujan marciales a los que nada oyen
Extraterrestre extraño
cruza con paso lento entre tanta torre
un libro abierto entre las manos,
una caricia en su recuerdo esconde,
Miles de sombras fugaces
pasan cerca del extraño hombre
hijos del tedio y de sus secuaces
hijos de la ciudad donde todos corren
¿cual es la medida del tiempo?
¿que es lo que persiguen las silenciosas voces?
en esto piensa con su paso lento
mientras le empujan los más veloces....
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