Habla con los dientes apretados
las labios incoloros, vacíos de sangre,
la rabia brota por sus costados
al ver las noticias junto a mi madre
Aquello por lo que lucharon
soñando sueños tras años de hambre,
sanidad universal lo llamaron
sanidad para todos, y todos iguales
El hijo del obrero junto al hijo del rico
todos aprendiendo en la misma clase
todos conviviendo en alegre revoltijo
todos en igualdad de oportunidades
Todos iguales ante la ley
todos protegidos de los desmanes
un país justo donde no es la fe
quien dicta tu suerte en los tribunales
Las palabras se le atragantan
como víctimas muertas en feroces fauces
maldiciones como flechas saltan
contra tantos poderosos miserables
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Hoy te siento muy cerca
en la misma trinchera, mi amado padre,
hoy recogemos el testigo de vuestra pelea
en esta inacabable lucha de clases